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Las empresas suelen valorarse por sus activos tangibles (bienes muebles, inmuebles, mobiliario, maquinaria, entre otros), y por sus activos intangibles como los contratos, clientes, posicionamiento del mercado, know how. Sin embargo, existe un activo más importante que suele quedar por fuera de ésta valoración; las marcas o signos distintivos.

La marca puede comprarse con un canal directo entre el empresario y el consumidor, pese a que no existe una negociación directa, el empresario debe convencer al consumidor que su producto se ajusta a las necesidades de éste. En un mercado de consumo existen cada vez más agentes productores, pero también hay más consumidores y son cada vez son más críticos y especializados, lo cual genera una competencia para que las marcas sobresalgan.

Si el empresario logra un posicionamiento de mercado y que su marca sea reconocida (por calidad, precio o trayectoria, etc) éste activo intangible puede valer más que sus otros bienes. Para valorar este tipo de activos es necesario hacer un estudio contable financiero basado en las normas internacionales de contabilidad y las normas internacionales de la información financiera.

Este estudio sirve para establecer información contable actualizada, también desde el punto fiscal se le puede dar un tratamiento especial según lo contemplado en la Ley de Impuesto Sobre la Renta, asimismo según la Ley de Garantía mobiliaria se pueden dar en garantía ante entidades financieras.

Por ende, al valorar la marca se asegura establecer el precio real de una empresa, esta información es indispensable para establecer estrategias fiscales que sirvan para asegurar un mejor posicionamiento en el mercado, frente a los consumidores, inversionistas y otros agentes que participen en el mercado común de bienes y servicios.

Este estudio debe realizarse por profesionales en el área financiera- contable y el área legal, nuestra empresa es pionera en ejecutar y plasmar este producto para las empresas.

 

Irina Arguedas Calvo

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